Cuando se cierra una puerta, se abre otra. Lo saben en Las Tinajas, la pollería peruana que en casi 20 años de existencia ha logrado ampliar su presencia en distintas zonas de Lima y también en Ayacucho, Puerto Maldonado y Chiclayo.
Este negocio familiar –iniciado por Epifanio Mendoza, empresario ayacuchano fundador de la Corporación Mendoza, hace 25 años– iba viento en popa. De hecho, a inicios de 2020 abrieron un nuevo local en Breña. Sin embargo, la pandemia lo cambió todo.
Para la mayoría de los negocios, cerrar casi dos meses no fue nada fácil. Por un lado, cumplir con los colaboradores se fue haciendo cada vez más complicado. Por otro, la posibilidad del delivery y recojo en tienda, si bien era algo positivo en ese contexto, era sumamente retador.
La única manera de lograrlo era a través de canales digitales, una plataforma que el restaurante aún no había explorado del todo. Hasta ese momento, las acciones de marketing se habían enfocado en canales tradicionales. ¿Cómo cambiar el chip con éxito?
Abriendo la puerta digital para el equipo
Las Tinajas tuvo un gran aliado para sacar adelante el negocio, aún en tiempos de crisis. Gracias al programa Crecemos Juntos, hemos podido capacitar a su equipo para que dominen las redes sociales y así lleguen a su público de forma más efectiva.
“Tomamos una capacitación de marketing que nos sirvió bastante y la hemos aprovechado en nuestras redes sociales, que antes no le dábamos tanta importancia. Nos dimos cuenta de que el canal tradicional de marketing no era suficiente. Hemos evolucionado”, cuenta Diana Mendoza, jefe administrativo.
Esto sirvió como un empujón más para un trabajo que venía de antes, gracias a la venta consultiva. A través de este modelo, nuestros vendedores conocen mejor a sus aliados, investigan qué necesitan y a qué aspiran. Así, esta relación basada en la confianza garantiza mejores resultados. Y es que no se trata solo de vender, sino de dar el soporte para ello.
Hacia adelante
Lo que no ha cambiado en Las Tinajas es el sabor intenso y el gran tamaño de sus pollos a la brasa, los elementos diferenciadores de la marca. Tampoco, el buen servicio y la importancia de brindar una experiencia a sus clientes, quienes también acuden a sus locales por las carnes y parrillas.
Las Tinajas, ahora no solo atiende en sus locales, sino también mediante sus canales digitales.
“Es una gran satisfacción ver cómo crece la empresa con el esfuerzo de todos los trabajadores. Para eso, se necesita compromiso y ser perseverante. Las situaciones se pueden poner difíciles, pero todo tiene una solución”, reflexiona Diana.
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